Santiago Ballester, el nuevo presidente de Convento Jerusalén, tiene 48 años y pertenece a la comisión desde niño. En sus primeras horas al frente del cargo, ya está pensado en los proyectos de futuro. Y lo tiene claro: la comisión seguirá adelante con sus valores y con la monumentalidad de sus fallas. Ballester quiere imprimir a la comisión el mismo espíritu emprendedor que ejerce como director comercial de Autoval.

-¿Cuál es el primer objetivo que quiere conseguir como presidente de Convento Jerusalén?

-Antes de empezar a darle vueltas a los proyectos de futuro, lo principal es mantener la esencia de Convento Jerusalén, para que la falla siga siendo una piña y haga una transición ejemplar.

-¿Qué proyectos pretende impulsar de forma más inmediata?

-Tengo muchas ideas. Pero lógicamente el principal objetivo es que Convento siga teniendo los mismos valores heredados de nuestros padres y del anterior presidente. Mantener los presupuestos y conseguir primeros premios.

-¿Ya ha nombrado directiva?

-Voy a aprovechar estos días de Pascua para estudiar qué personas quiero que formen parte de la directiva. De momento, ya hemos nombrado presidente honorífico perpetuo a Jesús Barrachina y a Rafa Cartagena, como secretario general.

-¿Se va a rodear de gente joven?

-Sobre todo quiero gente activa, y eso incluye jóvenes para tirar adelante con un nuevo proyecto. Insisto en la idea de gente activa porque necesitamos personas que sepan captar nuevas vías de ingresos y patrocinadores porque todas las fallas estamos perdiendo fondos.

-¿Qué ha aprendido de su antecesor, Jesús Barrachina?

-Del mundo de las fallas, he aprendido del mejor maestro. Me ha enseñado cómo dirigir una comisión, cómo fijarme en el tema de elección de artistas, en el montaje de eventos y de carpas.... Sabe mucho.

-¿Le ha pedido consejos?

-De momento no, pero lo haré. Es un reto muy grande relevarle.

-¿Quiere ser presidente de la Federación de Especial?

-Este año ni me lo planteo. Afrontar el reto de ser presidente de Convento es suficiente.

-Nou Campanar bajó el listón. ¿Eso da ventaja?

-Muchas fallas han bajado la inversión económica . Nosotros llevamos seis años con el máximo presupuesto. Nunca haremos locuras como Nou Campanar, que durante muchos años tenía partidas astronómicas y ahora están como están. Nosotros seremos coherentes.

-¿Convento seguirá siendo la falla de los ricos?

-¿Y por qué tiene que dejar de serlo? Son familias y valores que vienen de los padres. Es una falla con muchos empresarios, pero cuando entramos en el casal somos falleros del primero hasta el último.

-¿Qué tanto por ciento de los ingresos llegan de patrocinios?

-Son un pilar fundamental. Representan el 30% de la falla.

-¿Las falleras mayores seguirán haciendo aportaciones?

-Por supuesto.

-¿Con la crisis hay menos candidatas a fallera mayor?

-No. De hecho, tenemos aseguradas falleras mayores infantiles hasta 2025, y en mayores los tres próximos años ya están cogidos.

-¿Han perdido falleros?

-Tenemos una gran comisión infantil, con 160 niños. Hay 160 mujeres y 100 hombres y juveniles.

-¿Van a competir en primera línea en las luces?

-Estamos haciendo un estudio, veremos si luego es factible. Queremos ver si podemos competir en primer nivel y estamos mirando el presupuesto y también si las aceras nos permiten instalar un gran montaje.

-El maestro mayor del gremio dijo que había fallas con más volumen del que tocaba. ¿Qué opina?

-Es extraño o cuanto menos curioso que algunas fallas, con el presupuesto que presentaban, de repente puedan plantar monumentos con tanto volumen. Yo estoy de acuerdo con el maestro mayor del gremio.

-Barrachina dijo que Pedro Santaeulalia estaría en Convento hasta que quisiera. ¿Será así?

-Vamos a hablar con él para que continúe todos los años que quiera. Estamos encantados con él y con Javi Fernández.